La regulación legal de las cooperativas es una competencia delegada a las autonomías. Por ello, las cooperativas de viviendas se regulan principalmente por la ley autonómica del territorio donde desarrollan su actividad.
Además existe una ley estatal: la Ley 27/1999, de 16 de julio, de Cooperativas, que se aplica en aquellas Comunidades Autónomas que no dispongan de ley autonómica y también, de modo supletorio, sobre aquellos aspectos no regulados por las distintas leyes autonómicas.
Para completar el conjunto de normas que van a regular el funcionamiento de cada Cooperativa, cada una de ellas se regirá por lo establecido en sus Estatutos Sociales, debidamente inscritos el registro público correspondiente (Registro de Cooperativas). Los socios tienen derecho a exigir que se les entregue una copia de los Estatutos al acceder a una cooperativa.
Los socios de las cooperativas podrán, a su vez, establecer democráticamente las reglas de funcionamiento a través de sus órganos sociales y siempre con sujeción a los Estatutos y a la Ley de Cooperativas.